REFLEXIONANDO A MEDIA TEMPORADA

Después de tantas competiciones seguidas llega el momento en que una quiere y necesita un respiro, coger aire de nuevo para seguir entrenando, para poder afrontar la segunda parte de la temporada. Es decir, descansar de semanas de competición tras competición y pasa a realizar entrenos de calidad durante algunas semanitas.

Sólo espero tener fuerzas suficientes para poder estar al mismo nivel que en la primera parte de la temporada o si se puede un puntito más por encima, simplemente cuidando esos pequeños detalles que a veces parecen ser insignificantes pero que a la vez te pueden condicionar mucho.

Hasta el momento estoy contenta de los resultados hechos hasta ahora, después de un comienzo de temporada un poco tardío e irregular. Sin ir más lejos, he notado una pequeña mejora encima de las dos ruedas respecto al año pasado, como vi en el parcial del Half Challenge Maresme; y por pequeña que sea me siento satisfecha, aunque esto sólo es un pasito adelante y quedan todavía muuuuchos pasos para llegar a un nivel aceptable, pero ahí estamos... intentando ir consolidando los entrenos encima de la bici y asimilando la suma de kms y ritmos…

También decir que he aprendido a estar más centrada y tranquila en los días previos a la competición, cosa que me costaba controlar y que ahora tengo claro que no me tengo que meter presión a mí misma, que no sirve de nada, sino que todo lo contrario: más nervios en tu cuerpo que no te dejan disfrutar al 100% de las competiciones y del ambiente que las rodea.   

A partir de ahora empieza la diversión en cuánto a competiciones se refiere, ya que en esta segunda parte de la temporada están muy juntos mis objetivos principales: Campionat de Catalunya en Pont de Suert (Olímpico) y Campeonato de España en Pontevedra (Olímpico) y esperando si se disputa el Campeonato de España distancia sprint para acabar de decidir el resto de competiciones. Y si me convocan en el Campeonato de España por Autonomías seria genial repetir experiencia como el año pasada y poder completar la puntuación para el ranquin nacional.

Por si no fueran pocas las competiciones que me faltan hasta ahora, también me estoy planteando despedir la temporada con un Half, aprovechando el volumen acumulado y que es una distancia que me gusta y donde vivo con más intensidad las emociones que me aporta el triatlón.  

De momento tengo la confianza que esta segunda parte de la temporada irá mejor que la primera, ya que entrenando las sensaciones son buenas, aunque tengo que reconocer que hay días de todo, como la vida misma, pero se tienen que superar los, malos momentos para ir creciendo. Aunque la verdad es que en los últimos días, la mayoría de ellos son buenos.

Ya tengo ganas de competir mañana en el Campionat de Catalunya, recuperar bien y poder hacer un buen mes de agosto con continuidad y entrenos con intensidades elevadas, para buscar una buena puesta a punto para el Campeonato de España de principios de septiembre. Ahora sólo toca mirar hacia delante y confiar en mí para que todo el sacrificio, sano por supuesto, que se hace día a día de su fruto el día que lo tenga que dar. Sin olvidar nunca que lo más importante es disfrutar siempre de este bonito deporte.

Continuará… 

MINI-TOUR (2A PARTE).

Continuamos con los “etapones” de mi Mini-Tour…

2ª ETAPA: Mont-Louis-Ax-les-Thermes-Porté-Puymorens-Puigcerdà: 135 kms.

Empezamos la mañana con un buen desayuno, ya que nos esperaba un etapón, subiendo el Col de la Quillane, el Col des Hares, el Col de Pailhères y el Col de Puymorens, sólo faltaba Contador y Andy Schleck para ser una etapa de auténtico Tour.

Con todo esto tendría que dosificar muy bien mis fuerzas ya que nunca había hecho tantos kms en un mismo día y menos tan duros como lo que me esperaba… Al ser muchas horas encima de la bici esto implica tener que comer, comer, comer… y comer encima de ella así que lleno mis bolsillos del maillot de barritas y geles. Este tema lo controlé muy bien, comiendo algo cada 40 minutos/una hora, para no sufrir ninguna pájara o algo por el estilo. Ahhhh! Sin dejar de lado hidratarse durante todo el rato ya que el calor apretaba.

El inicio de la etapa era más o menos fácil, pues des de Mont-Louis la carretera iba picando hacia arriba pero sin grandes desniveles, hasta coronar el Col de la Quillane (1714m), luego rápida bajada con unas vistas espectaculares del Lago de Matamala, donde se disputa el Triatlón Altriman. Posteriormente pasamos Formigueres y al llegar a Puyvalador nos desviamos a la izquierda para empezar a subir un pequeño puertecito en una carretera estrecha (el Col des Hares 1517m), que nos llevaría hasta el pueblo de Mijanés, donde enlazábamos con la subida al Col de Pailheres (2001m), 10’4 kms al 8’5% de desnivel medio, con rampas de hasta el 10%, bastante constante todo el puerto.

En este momento me descuelgo de la rueda de Sergi, por el bien de mi salud, jeje, así que cojo mi ritmo y subo al “tran-tran”. Empiezo quizás demasiado fuerte, ya que veo que Sergi no se me va demasiado y luego me doy cuenta, así que aflojo, ya que todavía quedaba una hora de ascensión y otro puerto por ascender (Col de Puymorens 1915m).

Mi gregario y yo, la líder, jejeje

Coronamos el puerto y bajada técnica y con mal asfalto al principio, aunque por momentos divertida, hasta llegar al pueblo de Ax-Les-Thermes, dónde hacemos una Coca-Cola para reponer azúcares y empezar el último puerto de la jornada, 28 kms de ascensión hasta coronar el Col de Puymorens… casi dos horas de subida!!

Coronamos el último puerto de la jornada ya un poco agobiada y con ganas de llegar rápido a Puigcerdà… rápido, he dicho rápido??? Pues eso, me pongo a rueda de mi gregario de lujo, Sergi, intento no desgastarme, pues hace viento de cara y sólo tira él, y no bajamos de 40 km/h hasta Puigcerdà!!! Eso si, no puedo disputarle el sprint porqué la llegada es arriba de Puigcerdà, con una última subida de poco más de 1km que se me hace bastante durilla, sobretodo por todo el “tute” anterior. Lástima, me quedo sin el triunfo de etapa, jeje.

Ahora sólo toca una ducha rápida, un pequeño paseo hasta el centro para estirar piernas y a reponer energías con un buen capuccino y un gran muffin de nueces!!! Otros optan por un menú más “energético”, como es un suizo y un muffin de chocolate, eh, Sergi??

3ª ETAPA: Puigcerdà-Mont-Louis: 40 kms.

Como ayer el coche durmió en territorio francés, Mont-Louis, hoy tocaba ir en busca de él. Para no ir directos hasta Mont-Louis y empezar ya en subida, vamos dirección Barcelona para activar piernas unos 15 kms de llano antes de empezar a subir. Noto la fatiga en mis piernas de los dos días anteriores, aunque supongo que es normal después de tantos kms acumulados y que mis piernas no están acostumbradas a tantos kms ni desniveles. Como sé lo hecho hasta el momento sólo me queda salir e intentar buscar buenas sensaciones y si no es así, seguir hacia adelante con las sensaciones que salgan, ya que aquí es donde está el verdadero entreno y a la vez la mejora del aspecto mental del entrenamiento.

Estoy incómoda en la bici pero como es el último día hay que hacer un esfuerzo, así que me pongo a rueda de Sergi, intentando no despegarme, aprovechando que me marca un buen ritmo para mí, pero cuando pierdo un poco su rueda, me cuesta coger el ritmo por mi misma.

Acabamos coronando el Col de la Perche (1579m), para iniciar un rápido descenso hasta Mont-Louis, donde finalizo mi Mini-Tour, satisfecha por lo bien que he sabido llevar estos tres días de ciclismo en estado puro, controlando la comida, el ritmo, los malos momentos… y dispuesta a repetir!!

Ahora toca recuperar bien de estos días y asimilar lo entrenado y aprendido durante esta experiencia, y que mejor manera de hacerlo que ver el Tour de verdad des del sofá de casa y que sufran los ciclistas de verdad: Cancellara, Wiggins, Valverde, Samuel Sanchez, Cavendish y compañía.

Continuará...

MINI TOUR EN TRES ETAPAS (280 kms)

Hoy es el último día de vacaciones, mañana vuelve todo a la normalidad… que pena!!! Ahora que le había cogido el gustillo a esto de entrenar con dedicación exclusiva!!! Y puedo decir que disfruté, me gustó mucho y seguro que repetiré!!!

Aprovechando que este fin de semana empezaba el Tour y que teníamos esta semana libre nos hemos dedicado a trabajar mi punto débil en un particular MINI TOUR en territorio Hermida, huyendo de la ola de calor que afectaba a nuestra Catalunya central y buscando tierras más fresquitas como es la capital de la Cerdanya, Puigcerdà, donde teníamos nuestro campamento base. 

Nuestro "Head quarter" en Puigcerdà.

EL MINI TOUR constó de tres etapas con un total de 280 kms. Una primera etapa de toma de contacto, y vaya toma de contacto, subiendo la Collada de Toses por las dos vertientes, en total 105 kms. Una segunda etapa, la etapa reina, subiendo 4 puertos: Col de la Quillane (1714m), Col des Hares (1517m), Col de Pailheres (2001m) y Col de Puymorens (1915m), con un total de 135 kms (mi récord en cuánto a kms, a dureza y a horas encima de la bici). La tercera y última etapa consistía en un rodaje alrededor de Puigcerdà, para posteriormente subir el Col de la Perche (1627m) y bajar hasta Mont-Louis (mi particular Champs Élysées de final del Tour) donde finalicé con 40 kms en mis piernas.

Aquí os dejo el detalle de cada una de las etapas…

1ª ETAPA: Puigcerdà – Ribes de Freser – Puigcerdà 105km

Llegamos a Puigcerdà después de un hora y un poco más de coche y como íbamos un poco tarde decidimos hacer una transición rápida coche – bici, antes de pasar por el alojamiento para descargar maletas.

Salimos de Puigcerdà dirección Barcelona y después de unos 5 km llanos, justo para calentar, empezamos a subir el que sería el puerto del día, la Collada de Toses, 22 kms de ascensión constante pero no muy dura hasta llegar a los 1800 m de la cima, alrededor de un 3’5% de desnivel medio. Una vez coronado el puerto, unos 4-5 kms llanos picando un poco para abajo, hasta empezar la bajada propiamente dicha, que nos llevaría hasta la población de Ribes de Freser.

Ahora tocaba deshacer el camino hecho, subiendo la Collada por la otra vertiente, más o menos el mismo quilometraje que la anterior, pero se me hizo más dura por los kms acumulados y por el cambio de ritmo que hice en los últimos 4 kms para engancharme a rueda de Sergi, que me pasó con el plato grande, ritmo que aguanté hasta coronar.

Empezamos a bajar rápido, con prudencia pero disfrutando de las curvas, hasta que… nos empieza a caer algo del cielo: primero gotitas de agua, luego gotas grandes, luego piedra, vaya tormenta nos estaba cayendo!!! Tormentas típicas de montaña provocadas por el calor. Duró poco pero lo justo para “refrescarnos”, practicar técnica de bajada sobre asfalto mojado y curtirse un poco más como deportista, jeje.

Llegamos a Puigcerdà y vemos que allí no había llovido, sin comentarios… hasta aquí la primera etapa del mini-Tour. Ahora tocaba recuperar-se bien, 3.500 m suaves en la piscina de Puigcerdà, una buena cena y a descansar que al día siguiente llegaba la etapa reina.

Continuará…