ÉRASE UNA VEZ EL CUERPO HUMANO…

Recuerdo cuando empecé a entrenar un poquito más en serio, es decir con regularidad: veía que día a día y poco a poco iba mejorando. Esto hacia que la motivación por competir y entrenar cada vez iba a mejor. Me encontraba bien físicamente y psicológicamente, dos factores muy importantes en cualquier deporte y que cuando uno de ellos falla hay un desequilibrio; mejor tenerlo todo controlado o lo que se pueda.

Hubo un periodo de entrenos que algo iba mal…estaba cansada, de mal humor, no podía, me dolían las piernas en cualquier pequeño esfuerzo, bajaba el rendimiento de los entrenos, tenía sueño a todas horas…hasta que empecé a saltarme días de entreno uno detrás de otro, sólo tenía ganas de tumbarme en el sofá y dormir. En este momento no estaba bien físicamente ya que me detectaron una anemia ferropénica muy grave y que a la vez me afectaría psicológicamente por no poder entrenar, ya que los médicos me prohibieron hacer deporte porque tenía que remontar los niveles bajos de hierro, ya que me dijeron que estaba al límite, casi para que me ingresaran.

En ese momento surgieron muchas preguntas, así que fui un poquito curiosa y empecé a buscar respuesta a todas esas preguntas que me afectaban, y mucho.

La anemia ferropénica surge cuando los niveles de ferritina, la reserva de hierro en nuestro cuerpo, están por debajo de 14ng/dl en mujeres y 30 ng/dl en hombres y los niveles de hemoglobina, encargada de transportar el oxígeno a las células,  están por debajo de 12g/dl en mujeres y 14g/dl en hombres. El hierro y la hemoglobina se complementan uno con el otro ya que, cuando uno falla no hay una buena oxidación y por tanto aparecen síntomas como; mareos, cansancio, fatiga, mucho sueño, palpitaciones, palidez… Si además eres mujer y triatleta también tenemos que tener presente la menstruación y la destrucción de los glóbulos rojos provocadas por el correr, cuando al chocar la planta del pie contra el suelo repetidas veces ocasiona la destrucción de los glóbulos rojos.

Para acabar, un dato curioso: según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la deficiencia de hierro se considera el primer desorden nutricional en el mundo. Aproximadamente el 80% de la población tendría deficiencia de hierro, mientras que el 30· padecería de anemia por deficiencia de hierro.

Visto todo esto, sólo decir que, si añadimos el elevado ritmo que llevamos en nuestro día a día en el trabajo, la familia y la vida social, al ritmo y entrenos que hacemos los triatletas, es muy importante tener un control sobre los déficits que podamos tener, mediante análisis de sangre periódicos supervisados por un médico, y controlar muy de cerca la alimentación, que siempre sea equilibrada, tomar alimentos completos y ricos en nutrientes esenciales, aparte de la suplementación necesaria dónde no llegamos con los alimentos, cómo son el hierro y las vitaminas.

Y cómo lo he vivido en mis propias carnes, ahora me controlan los niveles de hierro cada 6 meses, mediante una analítica completa. Los resultados de la última me los dieron ayer, y de momento estoy a tope!!! Eso sí, debo controlar continuamente la ingesta de hierro, pues según me dicen los médicos, soy propensa a tener anemia, ya que a mi cuerpo le cuesta absorber el hierro, o sea que habrá que cuidarse.

Continuará...